Mi amigo Manuel Burgos y yo nos planteamos hacer este brevet entre el viernes 14 de Junio y el domingo 16, sin parar a dormir en ningún alojamiento. Era la primera vez en mi vida que intentaba hacer algo así, aunque en varias ocasiones he realizado tiradas de hasta 530 km, pero se trata de pruebas con muchos participantes, en las que uno se encuentra arropado por otros ciclistas, con asistencias en los controles. En este caso, al ser un brevet de baja participación, la aventura tenía mucho de supervivencia y resistencia al sueño.

La docena inicial de participantes se disgregó rápidamente cuando los de cabeza pusieron un fuerte ritmo en las primeras subidas. Todos teníamos bastante respeto a la zona montañosa entre Ademuz y Cuenca, con fuertes pendientes y carreteras rotas; no nos faltaban razones para temer, como pudimos comprobar al día siguiente.

Finalmente llegamos a meta en San Martín de la Vega en la mañana del domingo 16, con poco más de una hora de margen sobre el tiempo máximo, establecido en 40 horas para 600 km. El vídeo ofrece un buen resumen de lo que fue la ruta.

Raúl Plagaro, de Vitoria, es un randonneur libre, que se dedica a hacer pruebas por diferentes sitios a los que se desplaza con su furgoneta. Decició hacer la Flecha del Azahar, organizada por Randonneurs del Azahar, que en el año 2024 tenía meta en Castillo de Locubín, y se le ocurrió montar un equipo con varias piezas sacadas de diferentes entornos. Nos fue llamando uno a uno, como si fueramos un equipo de superhéroes, en el que cada uno aportaba una habilidad. Y así nos reunimos Ángel Ruiz, Joaquín Almirón, Yolanda Hernández y José Jiménez, conformando un grupo heterogéneo pero muy bien avenido y con ganas de disfrutar en la ruta. Partimos de Aranjuez el viernes 5 de Abril a las 19 h.

Las normas de la Flecha especifican que se deben recorrer más de 350 km y llegar en 24 horas. No se puede ir más deprisa de lo especificado. Nosotros diseñamos un recorrido por Ciudad Real que bajaba hasta el Valle de Alcudia, para cruzar Sierra Madrona y bajar desde Sierrra Morena a Montoro. Después seguíamos por Bujalance y entrábamos a la provincia de Jaén por Valenzuela. En la tarde del sábado 6 de Abril llegamos a Castillo de Locubín, tal como estaba previsto. Interesante aventura en la que primaba el compañerismo y camaradería.

Organizado por el GDC Pueblo Nuevo, el 13 de Abril tuvo lugar este brevet de 200 km se salía de los recorridos habituales. Fue una buena oportunidad para conocer algunos pueblos nuevos, como el propio Auñón o los pintorescos Zorita de los Canes y Almonacid de Zorita, rodando con mis compañeros del Pakefte, Paco Martín y Miguel Prada.

Hicimos el recorrido tranquilos, a nuestro aire, con un tiempo espléndido (quizá algo caluroso a mediodía) y terminamos bastante bien. Sobre todo fue un buen chute de moral para Miguel, que llevaba mucho tiempo sin hacer brevets y tenía algunas dudas, pero lo solventó perfectamente.

Se dio la salida en Loeches a las 8 AM, teniendo un límite de 13:30 horas para completar los 200 kilómetros. En muchos momentos de la ruta fuimos rodando con randonneurs históricos del club organizador, como Emilio Álvarez, Ricardo Agudo, Antonio Paredes, Manuel Arias y muchos otros.

Ruta para bicicletas de gravel, realizada con mi amigo Roberto Fernández, tomando como punto de partida el pueblo de Tamajón, y siguiendo por la Pista Blanca desde Majaelrayo hasta Cantalojas, con un bucle curioso por el Hayedo de la Tejera Negra y regreso por carretera a través de Galve de Sorbe, Alto del Campanario y Valverde de los Arroyos.

La ruta coincide en parte con el recorrido de la Súper Randonnée «Los Machacas». que organiza el Club Ciclista Chamartín y para mí fue precisamente un prolegómeno de la misma, ya que de manera imprevista terminé realizando esa Súper Randonnée unas semanas más tarde de este día.

La comarca de los pueblos negros de Guadalajara nunca defrauda. Permite hacer una escapada desde Madrid hasta un entorno muy agreste y bastante despoblado, donde siempre se disfruta de la naturaleza. En este caso con el plus de recorrer la Pista Blanca, un camino que sube hacia el pico Ocejón, hasta una altitud de 1600 metros, atravesando zonas ganaderas y el precioso valle del río Sonsaz. afluente del río Sorbe, junto con otros cauces que bajan desde la Sierra de la Pela, alimentando la cuenca del río Henares.

Esta ruta es un gran rodeo por la Sierra Norte de Guadalajara, tomando como centro geográfico el Pico Ocejón. Partí de Tamajón en dirección sur, para cruzar el río Sorbe en Muriel y subir a Cogolludo. Desde ahí, por la carretera de Veguillas, de la que me desvié por una carretera secundaria hacia Navas de Jadraque y Bustares, al pie del Alto Rey. Hice la subida hasta las antenas, a 1740 metros de altitud, aunque había un camino de tierra que subía hasta el verdadero punto más alto de la montaña. Lo dejaré para otro día que suba con la bicicleta de gravel.

La ruta continúa hasta el norte por Condemios, Galve de Sorbe y Villacadima, cruzando a la provincia de Segovia por la Sierra de la Pela, para entrar en Santibáñez de Ayllón. Un desvío a la izquierda nos lleva a través de pueblos de arquitectura roja, como Madriguera, hasta Riaza. Volvemos a la provincia de Guadalajara por el Puerto de la Quesera, desde donde se desciende a Majaelrayo por una sucesión de subidas y bajadas interminables en el valle del río Jaramilla. Por último, pasamos Campillejo, El Espinar y la Ciudad Encantada de Tamajón. 178 km con 3400 metros de desnivel acumulado.

Aprovechando unas vacaciones en Maspalomas, Gran Canaria, alquilé una bicicleta en Rent Bike Pla Meloneras, para hacer una ruta cicloturista por la zona. Y ¿cómo no?, aproveché para subir a un lugar emblemático de la isla, el Pico del Pozo de las Nieves, a 1950 metros de altitud sobre el nivel del mar. Desde allí se pueden disfrutar de espléndidas vistas, incluso de islas vecinas como Tenerife, con el Teide de fondo.

Me desplacé en coche hasta el Mirador de la Degollada de las Yeguas, y desde ahí subí en bici hasta la cumbre. La ruta no refleja los primeros kilómetros porque se me olvidó comenzar a registrar hasta que terminó la bajada inicial. Salieron 39 km de subida prácticamente continua, con breves descansos y varios cambios de paisaje, pasando por los núcleos de Fataga, San Bartolomé de Tirajana, La Plata, Ayacata y los Llanos de la Pez.

La ruta se quedó en 75 kilómetros y 2100 metros de desnivel acumulado, porque volví por el mismo camino de subida. Me quedé con las ganas de explorar otras carreteras y bajar hacia la costa occidental de Mogán, pero el dueño de la tienda de bicicletas me lo desaconsejó, ya que la carretera de bajada estaba muy rota y tampoco sería agradable el camino de la costa de vuelta a Maspalomas.

Último día de ruta en las vacaciones de este verano. Aproveché un día suelto para desplazarme hasta Menasalbas, en la provincia de Toledo, y desde ahí realizar una gran ruta rodeando el Parque Nacional de Cabañeros y el Embalse de Cíjara. Comencé camino de Navahermosa, donde inicié la subida a la ermita de La Milagra y el puerto del Risco de las Paradas, donde tomé un cruce a la derecha que me llevó por una carretera completamente solitaria durante casi 70 kilómetros a lo largo del Parque, hasta el pueblo de Gamonoso, donde pude repostar agua. Desde allí bajé hasta el embalse de Cíjara, que bordeé durante muchos kilómetros para volver por la Reserva de la Biosfera de la Siberia (Extremadura) hacia Helechosa de los Montes y crucé de nuevo el Parque de Cabañeros entre Horcajo de los Montes y Retuerta del Bullaque. Finalmente volví al valle inicial atravesando el puerto del Robledillo y bajada por San Pedro de los Montes. En definitiva, una bonita ruta en la que recorrí 4 provincias: Toledo, Cáceres, Badajoz y Ciudad Real.